SUGESTIVO MENSAJE PRESIDENCIAL SOBRE LA ANMAT

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“La ANMAT es del Estado y los que están en la ANMAT deben responder al Estado y no a los laboratorios”, fue el insual comentario de la presidenta Cristina Fernández durante su extenso mensaje ante la Asamblea Legislativa.

Inusual, porque salvo en contadas ocasiones (AMIA, Partido Judicial, Embajada de Israel/Corte Suprema) no abundó en referencias directas que sonaran como imputaciones.
  Fernández confirmó que su gobierno impulsará la fabricación pública de los medicamentos y  que por eso “no se tiene que enojar ningún laboratorio”.
  “No necesitamos que nos pongan ningún cancerbero ni observadores en la ANMAT y la ANMAT es del Estado”, insistió la presidenta ante la Asamblea Legislativa, con gesto adusto dirigido al plenario.
El comentario de Cristina Fernández confirma que los cambios de octubre pasado en la ANMAT, cuando fue cesanteado su ex director Carlos Chiale, fueron motivados por la percepción de que el organismo estaba ”cooptado” por la industria.
En aquellos días, un importante funcionario de la Jefatura de Gabinete confirmaba a Pharmabaires que “finalmente” Cristina Fernández se había “dado cuenta” de la presunta colonización de la ANMAT por parte de los labatorios.
Las palabras de Fernández fueron compartidas en el mismo palco por el actual ministro de Salud, Daniel Gollan, el ex ministro y actual embajador en Chile, Ginés González García, y la actual directora de la Iname, Raquel  Méndez.
Gollan, en una de sus primeras actividades oficiales, el viernes pasado reunió a los secretarios, directores y personal jerárquico del Ministerio de Salud para afirmar que “vamos a trabajar hasta el último día como si fuera el primero”.
  “No vamos a especular que como vamos a estar hasta el 10 de diciembre, esto ya se termina”, insistió Gollan, quien prometió recorrer “piso por piso” del Ministerio de Salud para conocer y compartir con todo el personal.
Gollan reivindicó “el compromiso militante más que el compromiso laboral” y anticipó que “nos espera un año muy duro de trabajo”.
  Como ejemplo, mencionó que durante su actividad en el Ministerio de Salud como viceministro desde junio pasado, su equipo estaba acostumbrando a jornadas de doce a catorce horas de trabajo por día.