Los presidentes y Jefes de Estados de los países iberoamericanos  reclamaron “un mayor apoyo internacional a la iniciativa COVAX de la Organización Mundial de la Salud y a los mecanismos específicos de carácter multilateral que se están desplegando para asegurar el acceso a vacunas y medios preventivos y de mitigación de manera justa, equitativa, transparente, eficiente y oportuna”.

El pedido está contenido en la declaración final de la XXVII Cumbre Iberoamericana que sesionó con epicentro en el principado de Andorra y que había sido postergada el año pasado por la pandemia.

Durante la Cumbre Iberoamericana (presencial y virtual) los presidentes coincidieron en reclamar un acceso equitativo a las vacunas COVID y cuestionaron el monopolio de los países desarrollados.

España anunció que donará vacunas a los países latinoamericanos, a medida que avance la vacunación en su país.

La declaración final también pidió “apoyar una revisión y flexibilización de los criterios de elegibilidad y condiciones financieras en las instituciones financieras internacionales que permitan tratos adecuados y que fomenten el desarrollo a largo plazo partiendo de la necesidad de que exista sostenibilidad de la deuda de los países.

Los firmantes también solicitaron “considerar iniciativas que permitan la negociación de tratamientos coordinados de la deuda externa, caso por caso, a países altamente endeudados como consecuencia de la pandemia”.

FERNÁNDEZ PIDIÓ GARANTIZAR LA PRODUCCIÓN Y DISTRIBUCIÓN EQUITATIVA DE LAS VACUNAS

El presidente Alberto Fernández llamó a las naciones de la región a actuar “unidas por solidaridad” para “garantizar la producción y distribución equitativa de las vacunas” contra la pandemia.

En su exposición, realizada de manera virtual desde la Residencia de Olivos y acompañado del canciller Felipe Solá, Fernández enfatizó que “es indispensable profundizar la transferencia de tecnologías y la cooperación financiera internacional, sin exclusiones”.

Además, propuso encontrar mecanismos innovadores que faciliten el acceso al financiamiento externo de los países de ingresos medios, durante su intervención en la XXVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno Andorra 2020, que se desarrolló bajo el lema “Innovación para el desarrollo sostenible -⁠ Objetivo 2030. Iberoamérica frente al reto del Coronavirus”.

Fernández alertó que después de la pandemia “el mundo se arriesga a una recuperación incompleta, desigual e insostenible”.

El presidente argentino “agradeció el “valioso apoyo” de las delegaciones que han acompañado el documento especial que presentó la Argentina junto a España sobre “Acceso a financiamiento externo para combatir al Covid-⁠19”, que busca promover el uso de todas las herramientas disponibles para que “nuestros países estén en mejores condiciones financieras para enfrentar esta situación excepcional”.

LA CUMBRE IBEROAMERICANA LAMENTÓ LA INEQUIDAD EN LA DISTRIBUCIÓN DE LAS VACUNAS

Los presidentes latinoamericanos, de España, Francia y Portugal, denunciaron “la "desigualdad abismal en el acceso a la vacunación" contra la pandemia e hicieron un llamado a fortalecer a la OMS.

El presidente de España, Pedro Sánchez, sostuvo que uno de los objetivos de esta Cumbre en Andorra fue, precisamente, “la necesidad de salir de la emergencia garantizando una vacunación equitativa en todo el mundo”.

“España donará, en cuanto sea posible, vacunas a América Latina para impulsar la lucha contra el coronavirus", anunció el presidente español a través de su cuenta de Twitter.

Rebeca Grynspan, Secretaria General Iberoamericana, aportó durante la Cumbre Iberoamericana datos estadísticos sobre los efectos desiguales de la pandemia en la región:

Con el 20% de la población mundial, el continente latinoamericano acumula el 70% de las muertes registradas en todo el planeta debido a la pandemia.

Los países de esa región que suman el 8,4% de la población mundial, han asumido el 28,7% de muertes provocadas por el COVID.

Más de 2,7 millones de empresas –principalmente Pymes– han tenido que cerrar, contribuyendo así a una contracción económica sin precedentes.

Sánchez reconoció la "fragilidad clarísima en la cadena de suministros" que existía al comienzo de la pandemia, cuando –según destacó– los gobiernos carecían de elementos de "anticipación" para hacer frente a la crisis que se avecinaba.

Desde Costa Rica, el presidente de ese país, Carlos Alvarado, denunció la "desigualdad abismal en el acceso a la vacunación" porque "el 53% de las vacunas hoy vendidas y despachadas están en poco menos de un 16% de la población de los países más ricos", mientras que "los países de ingreso medio", que suponen el 37% de la población del mundo, "solo tienen un tercio".

El presidente de Costa Rica, quien al comienzo de la pandemia impulsó un fondo global liberado de patentes de vacunas y tecnologías COVID, también reclamó un acuerdo en materia económica "para vacunar las economías de los países emergentes y en desarrollo".

El presidente de Chile, Sebastián Piñera, reconoció que “no hemos sido capaces de asegurarnos que la distribución de las vacunas sea eficaz, oportuna y equitativa”.

Mientras no estemos todos seguros, nadie va a estar totalmente seguro", remarcó el presidente chileno.

También habló de solidaridad el presidente francés, Emanuel Macron –invitado especial de esta cumbre iberoamericana–, quien llamó a implementar una "verdadera cooperación" en las políticas de vacunación.

"Para salir adelante necesitamos vacunar al máximo a nuestras poblaciones", afirmó Macron, quien apostó por una Organización Mundial de la Salud (OMS) que "sepa coordinar una agenda con el resto de organizaciones internacionales relevantes en la materia" y apuntale un "multilateralismo" también en el ámbito de las vacunas.

La necesidad de un "fortalecimiento" de la OMS estuvo presente también en la intervención del primer ministro de Portugal, António Costa, quien intervino de forma presencial en Andorra. "No hay derecho que algunos tengan la capacidad de asegurar la vacunación de su población y otras no, puedo vacunar al 100% de Portugal, pero si todo el mundo no lo hace no voy a estar más seguro en mi país", subrayó.