MAL DE CHAGAS: EXPERTOS ALERTARON SOBRE LA DESATENCIÓN GLOBAL DE LA ENFERMEDAD

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Mundo Sano en un encuentro internacional

La Real Academia Nacional de Medicina de España (RANME), en colaboración con la Iniciativa de Medicamentos para Enfermedades Olvidadas (DNDi), ha puesto de relieve la importancia de acelerar la eliminación de la transmisión congénita de la Enfermedad de Chagas.

La advertencia fue formulada durante un reciente conversatorio organizado en Madrid por la RANME, con la participación de académicos e investigadores de diferentes países, sobre todo de América Latina y España, quienes coincidieron que la transmisión congénita del Chagas supone un peligro para la salud pública global, ya que miles de mujeres en edad fértil pueden transmitir la enfermedad de madre a hijo.

Los panelistas subrayaron que los países afectados por la Enfermedad de Chagas en las Américas, con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Ministerio de Sanidad de España, la Agencia Española de Cooperación Internacional y Desarrollo (AECID) y organizaciones como DNDi y Fundación Mundo Sano de Argentina, se han comprometido a “tomar medidas y movilizar acciones para impulsar la eliminación de la transmisión materno-infantil como paso importante para poder eliminar la Enfermedad de Chagas como problema de salud pública”.

En este sentido, tal y como ha recalcado durante el encuentro la directora general de Salud Pública, Pilar Aparicio, el Ministerio de Sanidad de España ha lanzado el programa 'Chagas congénito cero'.

Por su parte, la presidenta Fundación Mundo Sano, Silvia Gold, dio a conocer la campaña “ningún bebé con Chagas”, un programa para frenar la transmisión congénita de la enfermedad, y destacó que Argentina es el país con más infecciones de Chagas del mundo.

“Sacar una enfermedad desatendida del silencio es muy complicado, por eso trabajamos en temas de comunicación”, reconoció Silvia Gold y añadió que “si bien el Chagas es una enfermedad iberoamericana, está ahora instalada en España por los lazos que nos unen”.

Gold explicó durante el seminario cómo una ONG estratégicamente asociada puede contribuir y ser nexo de unión entre todos los agentes implicados en la lucha de la enfermedad, desde entidades gubernamentales a grupos de investigación pasando por la industria farmacéutica o instituciones académicas.

Un ejemplo ha sido la puesta en marcha de un programa para el control de Chagas congénito logrando que lo firmaran los jefes de Estado de Iberoamérica, mencionó Gold.

"Todos reconocemos que la Enfermedad de Chagas y su control es complejo, mucho más aún en el actual momento de pandemia global por COVID-19", reconoció la presidenta de la Fundación Mundo Sano.

El director ejecutivo de DNDi-Ginebra, Bernard Pécoul, abordó cómo desde la investigación científica es factible conseguir grandes avances, a pesar de la complejidad del desarrollo de los tratamientos antiparasitarios, como han dejado patentes los avances en terapéutica pediátrica.

Bernard Pécoul explicó cómo la colaboración internacional entre organismos puede acelerar la investigación sobre la transmisión congénita del Chagas.

Pécoul puso como ejemplo del éxito el caso de Colombia, donde su organismo, en colaboración con el Ministerio de Salud, “logró un aumento de identificación de personas infectadas” en una zona con una alta prevalencia.

También destacó los logros que se están consiguiendo con la universalización del acceso a los tratamientos existentes, todo ello sin olvidar el compromiso de seguir trabajando en la búsqueda de la mejor terapéutica posible para los infectados de Chagas.

En este sentido, el doctor Luis Gerardo Castellanos, del departamento de Enfermedades transmisibles PAHO-OPS, describió la evolución estratégica que la OMS y la OPS han desarrollado integrando las enfermedades infecciosas transmisibles congénitamente.

Según ha destacado, están siendo fundamentales las acciones que la OPS, junto a la OMS, están llevando a cabo, definiendo los procesos a realizar conjuntamente con los gobiernos de los países afectados.

Castellanos destacó que fruto de la colaboración internacional, en los últimos años “se redujo a la mitad los potenciales infectados en América Latina, pasando de 120 millones a 60 millones”.

La doctora Miriam Ciscar, de la Agencia Española de Cooperación Internacional y Desarrollo (AECID), ha puesto de manifiesto cómo una organización gubernamental puede ser "determinante como eslabón necesario para establecer procesos que permitan contribuir a la equidad y el desarrollo de las comunidades más vulnerables", en este caso, afectadas por un problema de salud como la Enfermedad de Chagas.

El jefe del programa de enfermedad de Chagas DNDi, el doctor Sergio Sosa-Estani, coincidió que "todos reconocemos que la Enfermedad de Chagas y su control es complejo, mucho más aún en el actual momento de pandemia global por COVID-19”. “Pero también hay que reconocer que nos encontramos en una etapa muy especial en la que están confluyendo acciones para objetivos claros y concretos, tales como la eliminación de la transmisión congénita de la Enfermedad de Chagas", subrayó durante el conversatorio organizado en la sede de la Academia Nacional de Medicina de España.

El profesor y miembro de la Academia, Jorge Alvar, agregó que aproximadamente entre “seis y siete millones de personas padecen esta enfermedad en América Latina”, y como mínimo “1.200.000 mujeres en edad fértil están infectadas”.

España es el país no endémico con más casos de esta enfermedad parasitaria, sumando unos 42.000 casos de los 80.000 que se han detectado en Europa, según detalló el expositor.

Pilar Aparicio agregó a esta cifra que en España viven “unas 35.000 mujeres al año que pueden transmitir potencialmente” la enfermedad de madre a hijo.

Conclusiones

Tras la exposición de todos los participantes Sergio Sosa‐Estani, coordinador del programa de Chagas de DNDi, hizo un resumen resaltando lo más destacado de lo aportado por cada uno de ellos.

La doctora Pilar Aparicio, directora general de Salud Pública del Ministerio de Sanidad de España, reconoció la dimensión de la enfermedad en su país y habló del programa de salud pública que ha desarrollado. Dicho programa cuenta ya con intervenciones de eficacia demostrada que permitirán evidenciar que la interrupción de la transmisión congénita a escala nacional es posible, lo que supondrá una gran contribución de España en la lucha global contra la Enfermedad de Chagas.

La doctora Silvia Gold, presidenta Fundación Mundo Sano, compartió como una ONG estratégicamente asociada puede contribuir y ser nexo de unión entre todos los agentes implicados en la lucha de la enfermedad, desde entidades gubernamentales a grupos de investigación pasando por la industria farmacéutica o instituciones académicas. Una muestra destacada de ello ha sido la puesta en marcha de un programa para el control de Chagas congénito logrando que lo firmaran los Jefes de Estado de Iberoamérica.

Bernard Pécoul, director ejecutivo de DNDi‐Ginebra (Drugs for Neglected Diseases initiative) abordó como desde la investigación científica es factible conseguir grandes avances a pasar de la complejidad del desarrollo de los tratamientos antiparasitarios, como han dejado patentes los avances en terapéutica pediátrica. También destacó los logros que se están consiguiendo con la universalización del acceso a los tratamientos existentes, todo ello sin olvidar el compromiso de seguir trabajando en la búsqueda de la mejor terapéutica posible para los infectados de Chagas.

El doctor Luis Gerardo Castellanos, Departamento de Enfermedades transmisibles PAHO‐OPS, describió la evolución estratégica que la OMS y la OPS han desarrollado integrando las enfermedades infecciosas transmisibles congénitamente.

Están siendo fundamentales las acciones que la Organización Panamericana de la Salud junto a la Organización Mundial de la Salud están llevando a cabo, definiendo los procesos a realizar conjuntamente con los gobiernos de los países afectados.

La doctora Miriam Ciscar, de la Agencia Española de Cooperación Internacional y Desarrollo (AECID), puso de manifiesto como una organización gubernamental puede ser determinante como eslabón necesario para establecer procesos que permitan contribuir a la equidad y el desarrollo de las comunidades más vulnerables, en este caso afectadas por un problema de salud tan importante como es la Enfermedad de Chagas.

Sergio Sosa‐Estani terminó su resumen subrayando que “todos reconocemos que la Enfermedad de Chagas y su control el complejo, mucho más aún en el actual momento de pandemia global por COVID‐19. Pero así mismo también hay que reconocer que nos encontramos en una etapa muy espacial en la que están confluyendo acciones para objetivos claros y concretos, tales como la eliminación de la transmisión congénita de la Enfermedad de Chagas”. Todos los agentes implicados, concluyó, “tenemos una tremenda responsabilidad en que nazcan bebes saludables, libres de la Enfermedad de Chagas”.

Originaria de América Latina, la Enfermedad de Chagas tiene un alcance global. Entre 6 y 7 millones de personas en el mundo padecen la infección por Trypanosoma cruzi (T. cruzi) y solo en la región de las Américas, aproximadamente 65 millones de personas viven en zonas de exposición y corren el riesgo de contraer la enfermedad.

De los 80.000 casos de Chagas que hay en Europa, la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que más de 42.000 están en España y se estima que será una causa importante de trasplante cardíaco en las próximas décadas.

Según estimaciones de la propia OMS, alrededor de 1,12 millones de mujeres en edad fértil están infectadas por el parásito y la infección congénita por T. cruzi tiene una incidencia mínima de 15.000 casos anuales en América Latina.