LA VACUNA COVID DE PFIZER FUE EL MEDICAMENTO DE MÁS VENTA DURANTE 2022, CON PREDOMINIO DE LOS LABORATORIOS ESTADOUNIDENSES ENTRE LOS DIEZ PRIMEROS

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La vacuna de Pfizer para el COVID fue el  fármaco de mayor facturación del mundo durante 2022. La multinacional estadounidense también colocó su antiviral Paxlovid en el ranking de los diez medicamentos con más ventas globales.

Pfizer facturó 35.400 millones de euros con su vacuna COVID, informaron la consultora británica Airfinity y el diario de economía Cinco Días de España.

“Se trata de una cifra estratosférica dentro de la industria farmacéutica, muy superior a los ingresos generados por cualquier otra terapia en la historia”, analizó Cinco Días.

“Gracias a la comercialización de este producto, además, Pfizer ha conseguido convertirse en el primer laboratorio que supera la barrera de los 100.000 millones de dólares en facturación el pasado año y a obtener un beneficio neto anual de 31.300 millones”, agregó.

Esta vacuna, llamada Comirnaty, encabeza el ranking de los fármacos con más ventas del mundo del pasado año, según los datos proporcionados por la consultora AirFinity.

Comirnaty de Pfizer ha generado 70.000 millones en ventas en los dos últimos años.

En cualquier caso, se prevé que en 2023 comienza el declive de este producto –desarrollado conjuntamente con la firma alemana BioNTech– por el control de la pandemia y, provoque que los ingresos del laboratorio estadounidense caigan entre un 33% y un 29%, según sus propias previsiones publicadas el 31 de enero.

Hasta la llegada de la vacuna Comirnaty, el medicamento con más ingresos en el mundo era Humira, indicado para tratar diversas patologías como artritis, psoriasis, enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa.

De hecho, en los últimos cinco años ha aportado más de 93.240 millones de euros a su fabricante estadounidense Abbvie, según Airfinity. El pasado año, fue el segundo fármaco más vendido, generando casi 20.000 millones en ingresos.

El tercer producto que más ingresos generó en el mundo es Keytruda, un antitumoral de Merck Sharp & Dohme (MSD), por el que el fabricante estadounidense embolsó más de 19.600 millones.

Es, además, el medicamento económicamente de más éxito de la nueva clase de productos de inmunoterapia frente al cáncer.

En el caso de este anticuerpo monoclonal, se aprobó para melanoma y, posteriormente, se ha utilizado para otras indicaciones como el cáncer de pulmón y otra decena de tumores.

Pfizer, además, colocó el pasado año el antiviral Paxlovid contra el COVID entre los medicamentos de mayor venta con una facturación de 17.731 millones. Se trata del primer tratamiento oral para los afectados por este coronavirus.

También en el área terapéutica del COVID, la biotecnológica estadounidense Moderna logró el pasado año llevar entre los medicamentos mas vendidos a su vacuna Spikevax, que generó 17.230 millones para una compañía que apenas tenía ingresos antes de la pandemia.

Las empresas estadounidenses prácticamente copan el listado de blockbusters (superventas, en el argot del sector). Junto a Pfizer, Abbvie, Moderna y MSD.

BMS figura con tres medicamentos (el anticoagulante Eliquis, el antitumoral Revlimid y la inmunoterapia frente al cáncer Opdivo).

También destaca Janssen (farmacéutica de Johnson & Johnson) con el tratamiento Stelera de inmunología y con Imbruvica (antitumoral en colaboración con Abbvie).

Las empresas europeas han perdido presencia entre los tratamientos con más facturación. Es destacable la desaparición en el ranking de Roche, que hasta hace unos años tenía fuerte implantación con sus antitumorales que han ido perdiendo la patente.

Entre las empresas europeas, en el ranking solo se cuelan Bayer (con Eylea) y Sanofi (con Dupixent).