FINERENONA: NUEVO TRATAMIENTO PARA PACIENTES CON DIABETES TIPO 2 PARA PREVENIR LA ENFERMEDAD RENAL CRÓNICA Y RIESGOS CARDIOVASCULARES

Visto: 871

Lanzada recientemente en Argentina por Bayer, Finerenona es una innovadora molécula para tratar la enfermedad renal crónica (ERC) y prevenir eventos cardiovasculares mayores, las dos comorbilidades más complejas en pacientes diabéticos tipo 2 (DT2).

Según comunicó Lucrecia Secco (MN 120.747), Asesora Médica de Cono Sur para Finerenona, “Finerenona ya está aprobado en la mayoría de los países de Latinoamérica, Estados Unidos y Europa. Recientemente se lanzó en Argentina, y ya presenta evidencia clínica en las guías más importantes de la Sociedad de Diabetes y la Sociedad de Nefrología. Además fue incluida en las guías de la Sociedad Argentina de Cardiología para la indicación en la prevención renal y cardiovascular.”

¿Cómo actúa?

Bloquea de manera eficaz los receptores que contribuyen a la inflamación y cicatrización del corazón y el riñón. Su mecanismo de acción único ataca directamente la hiperactivación de los receptores mineral corticoides (MR) de manera no esteroidea en los riñones, corazón y vasos sanguíneos, con mayor potencia, selectividad y menor riesgo de eventos adversos” afirmó la Dra. Secco. Destacó también que “se posiciona como el primer antagonista mineralocorticoide no esteroide dedicado al riñón y con beneficios cardiovasculares”.

La Finerenona disminuye en un 32% el riesgo de insuficiencia cardíaca (IC) en pacientes sin historia previa de IC.

Según informaron desde Bayer, ya está disponible la venta en las farmacias de todo el país y está incluida dentro de la mayoría de las obras sociales y prepagas.

Finerenona tiene dos formas de presentación, en comprimidos de 10 mg. y 20 mg., la administración es de una toma diaria y es un tratamiento crónico.

Diabetes Melitus tipo 2 (DMT2) en Argentina

Según la última encuesta Nacional de Factores de Riesgo, la prevalencia de la diabetes mellitus tipo 2 (DMT2) es del 12,7%. Es una enfermedad metabólica, progresiva y crónica.[1]

Aunque la mayoría de los pacientes que padecen diabetes tipo 2 tienen conocimiento acerca de las comorbilidades más complicadas que podrían enfrentar, su enfoque diario tiende a centrarse en evitar los síntomas más evidentes, como el hormigueo en las extremidades, riesgo de amputaciones o problemas de visión. Esta tendencia a pasar por alto el seguimiento de comorbilidades, tales como la Enfermedad Renal Crónica (ERC) o afecciones cardíacas, resulta en una falta de detección temprana y en la búsqueda tardía de tratamientos capaces de prevenir desenlaces fatales o diálisis.

Esta nueva terapia apunta a estar al frente del tratamiento de la ERC y, a su vez, a proteger el corazón de los efectos causados por la progresión de la DT2.

Enfermedad Renal: silenciosa y asintomática

La Enfermedad Renal Crónica (ERC) afecta a 167 millones de personas con DT2 en todo el mundo y 30% de los pacientes con la insuficiencia DBT2 desarrollarán ERC.

En Argentina, 1 de cada 8 personas adultas padecen algún grado de ERC que equivale a más de 5 millones de argentinos, y se estima que más de la mitad no lo saben.

Según el Registro Argentino de Diálisis Crónica y Trasplante, poco más de 30.000 pacientes se encuentran en diálisis y 10.000 son trasplantados renales.

“Detectar la salud renal de una persona es sencillo y económico, solo con un análisis de sangre con medición de la creatinina y un análisis de orina puede obtenerse un diagnóstico precoz de la enfermedad renal”, afirmó la Dra. Marina Papaginovic, de la Sociedad Argentina de Nefrología, en la presentación del lanzamiento en Argentina, que se realizó en la compañía farmacéutica.

La Enfermedad Renal Crónica (ERC) está presente entre el 30% a 50% de los pacientes con DT2 y por ser asintomática y considerada “invisible” para los pacientes, hasta un 80% de ellos no tendrán un diagnóstico de esta condición en un estadio temprano.

Para desarrollar tratamientos diferenciales que aporten un valor clínico sustancial, Bayer llevó a cabo junto al Instituto Ipsos, con apoyo de la Sociedad Latinoamericana de Nefrología e Hipertensión (SLANH), una encuesta que reveló un escenario preocupante para la salud de los pacientes con esta clase de diabetes en América Latina.[2]

Según la encuesta, entre las seis comorbilidades más comunes recordadas por los entrevistados, los problemas cardíacos aparecen en último lugar. Las complicaciones renales ocupan el tercer lugar considerando todos los países. En ese sentido, el 13% de los encuestados sabe que sufre problemas renales, pero solo el 10% recibe tratamiento. Cuando un paciente presenta ERC, el tejido sano de sus riñones primero se inflama y después se vuelve fibroso (se generan cicatrices). Esto deriva en que pierdan su capacidad para filtrar la sangre y producir orina. Justamente, la principal función de los riñones es mantener al organismo equilibrado al eliminar del cuerpo los desechos que pueden a llegar a ser tóxicos, manteniendo balanceados los líquidos internos, así como la regulación de la presión sanguínea.

En Bayer consideran que estos datos refuerzan la importancia del rastreo de las complicaciones y comorbilidades de forma sistemática y periódica, porque más del 50% de los pacientes tendrá enfermedades cardiovasculares y, entre el 30 y 50% de los pacientes, padecerá enfermedad renal crónica causada por la diabetes tipo 2 (DM2). América Latina tiene aproximadamente 33 millones de personas con diabetes tipo 2, lo que equivale a 1 de cada 12 personas en la región la padecen.

Por ser asintomática y considerada “invisible” para los pacientes, hasta un 80% de ellos no tendrán un diagnóstico de enfermedad renal crónica. En la encuesta, la falta de conocimiento sobre las complicaciones a largo plazo de la enfermedad sigue siendo un desafío en América Latina, ya que 3 de cada 10 entrevistados no están al tanto de las posibles complicaciones en los riñones y en el corazón vinculadas a la diabetes tipo 2.

Secco, remarcó que: “Aunque los pacientes dijeron conocer las complicaciones más severas -como las cardiovasculares y renales-, no les prestan la misma atención que a las visibles, como los problemas de visión y el hormigueo en las extremidades. Es fundamental que se sumen nuevas drogas como Finerenona para contener los daños renales y cardiológicos”. Pero aclaró que “el estilo de vida en las personas con diabetes -que tiene que ver con un plan alimentario bajo en sodio, un buen control metabólico y una actividad física regular-, sigue siendo una herramienta valiosísima para la prevención”.

La División farmacéutica de Bayer apuesta a la innovación, con un portafolio robusto en Oncología, Cardiorrenal, Salud Femenina, Oftalmología y Hemofilia, además de un pipeline promisorio con terapia celular y génica, considerada a la vanguardia de la ciencia. En 2022, el Grupo Bayer invirtió 6.600 millones de euros en Investigación y Desarrollo (I+D), un 20% más que el año anterior. A nivel mundial, emplea a más de 16.000 personas en esta área, lo que equivale al 16% de los colaboradores de la empresa. A nivel Cono Sur lleva adelante 24  estudios clínicos de investigación, superando la cifra alcanzada en 2022 y 152 centros de investigación, estratégicamente ubicados para abordar diversas áreas terapéuticas y patologías.

[1] Encuesta Nacional de Factores de Riesgo
[2] Encuesta Ipsos