El Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos (SAFYB) se movilizó en Posadas, Misiones, en defensa de sus derechos profesionales, una demanda que se replica en otras provincias. “Los empresarios no respetan el papel del farmacéutico”, afirmó Marcelo Peretta, titular de la entidad sindical.

Durante la movilización, Peretta denunció que “los propietarios de las farmacias contratan un director técnico pero no respetan su función, porque es el responsable de todo lo que ocurra y las decisiones técnicas que se tomen”.
En Posadas, la protesta apuntó contra las cadenas Farmacity y Farmar cuestionadas “porque deberían tener a más profesionales por la cantidad de locales, pero no están cumpliendo este requisito. Y en algunos casos estarían pagando a los profesionales como monotributistas, algo que no está permitido”, señalaron desde el sindicato.

En Misiones “las empresas están degradando la matrícula de los profesionales, al inscribirlos como empleados no cualificados”, reforzó Peretta.

El titular de SAFYB subrayó que “los empresarios no le hacen caso (al farmacéutico) y deciden qué comprar, cuándo comprar, cuando vender con receta y cuando sin. Además de que no cumplen con el convenio colectivo de trabajo y pagan una diferencia salarial mucho menor a la que corresponde”. 

Las cadenas de farmacias  que “están inscribiendo a los farmacéuticos matriculados como empleados de comercio, para abaratar costos e incumplir con el convenio colectivo, que estipula que los profesionales deben cobrar un básico de 12 mil pesos, es decir, 5 mil pesos por encima de lo que están percibiendo en Misiones”, subrayó SAFYB.

Si bien Peretta aseguró que “nos estamos movilizando en todo el país”, la protesta se profundizó en Misiones porque “la diferencia salarial es mayor que en las demás provincias”.

“Ya informamos al Ministerio de Trabajo de la Nación y de la provincia, y también al Colegio de Farmacéuticos. “Necesitamos empresarios que defiendan el papel del profesional”, aseguró Marcelo Peretta.

Peretta argumentó que “están igualando con una persona que no tiene un título universitario, es obvio que no se los puede equiparar. Tenemos el mayor respeto por todos los trabajadores, pero no vamos a igualar lo que no es igual: la función de un director técnico asume toda la responsabilidad con su matrícula, inclusive por las cosas que se hagan en su nombre. Ese ayudante, si comete un error, el que paga los platos rotos es el farmacéutico. Estamos pidiendo que se dignifique (al profesional)”.
“El despacho directo lo puede hacer cualquier persona. Pero la consulta (sobre drogas) o la toma de presión o inyecciones, recae sobre el profesional. Necesitamos empresarios que defiendan el papel del profesional, no sólo para que la empresa mejore y ofrezca un mejor servicio, sino para que los medicamentos se usen con mayor responsabilidad en el país”, subrayó el dirigente.