Yoga y Salud: La respiración

Visto: 2833

Por Daniela Paruolo

¿Que tan importante es la respiración para vivir? Me responderán que respirar es indispensable para poder sobrevivir. Entonces voy a cambiar la pregunta: ¿Qué tan importante es la respiración en nuestra vida? Si la respiración es vital ¿Por qué le damos tan poca importancia? ¿Por qué, sobre todo, respiramos tan mal?

Como todos sabemos la respiración permite incorporar el aire en la inhalación permitiéndonos incorporar el oxígeno a  cada célula de nuestro cuerpo  para luego desechar las toxinas que produce nuestro metabolismo mediante la exhalación. 

También es uno de los mecanismos más importantes para una buena circulación sanguínea. Pensamos que el corazón es el único órgano encargado de esta función, sin embargo los músculos y el ejercicio respiratorio tienen un papel importantísimo en este proceso. Al respirar ponemos en funcionamiento una gran cantidad de órganos. En los pulmones la sangre no sólo obtiene el oxígeno y descarga el dióxido de carbono sino también el impulso para seguir su camino. 

Una buena respiración asimismo nos ayuda a mantener una buena postura. Ser conscientes de ella nos señala cuándo estamos perdiéndola. Con sólo probar respirar profundo nos damos cuenta que se abre el pecho, el aire empuja el diafragma, el abdomen se relaja y se expande lo que hace que se enderece la columna volviendo a su posición natural.  

El aire que inhalamos no sólo conlleva oxígeno sino también energía vital. Esto es lo que llaman  Prana o Ki. Cuando respiramos naturalmente dejamos que el mismo entre y nos vitalice, cuando respiramos alto o entrecortado la incorporación de esta energía es pobre.

A su vez respiración y emociones están muy ligadas: respirar es sentir. Cuando respiramos superficialmente lo que estamos haciendo es poner una barrera al sentimiento, mantenernos en la cabeza y no profundizar. Porque a veces profundizar duele. Limitamos la respiración, limitamos el sentimiento. Y la vida, no se piensa, se siente, lo que nos lleva a la conclusión que la anestesia que creemos es nuestra defensa nos aleja cada vez más de la vida.  

En este sentido la respiración es nuestra habilidad de dejar entrar y tomar la vida, la capacidad de dejar fluir, como así también nuestra afirmación de existencia, de tomar nuestro lugar en el mundo con pleno derecho. Los problemas respiratorios nos indican que hay un  rechazo a incorporar la vida en toda su plenitud, un miedo a contactarnos directamente con nosotros mismos y con la realidad, muchas veces con la creencia de que no somos merecedores de la vida que tenemos, que no tenemos derecho a, simplemente, ser. 

Sin embargo, es nuestra gran aliada, contamos con ella desde siempre, debemos dejar de limitarla y con una actitud de apertura  integrarnos plena y autoconscientemente con todo nuestro ser, con nuestro derecho a estar y crecer, de desarrollar todo nuestro potencial de inteligencia, expansión y luz. 

En la práctica de Yoga la respiración consciente nos ayuda mantener la continuidad de consciencia y a conectarnos con nuestra naturaleza logrando un estado de atención, relajación y apertura. Cuanto más profundo respiremos más sencillo se nos hará la práctica de profundización en la unión de cuerpo mente logrando un estado de mayor plenitud.

Respirar no es sólo tu derecho, respirar es tu vida. Y tu vida está en tus manos.