Las escuelas de salud pública de Estados Unidos y Canadá dijeron “no gracias” a los fondos de investigación de una nueva fundación antitabaco respaldada por la industria del tabaco. Philip Morris invirtió casi 1 mil millones de dólares en la Fundación para un Mundo Libre de Humo (Foundation for a Smoke-Free World), que se creó en septiembre y se comprometió a apoyar la investigación para acabar con el tabaquismo en todo el mundo.

 

Pero los decanos de Harvard University Johns Hopkins University y otras 15 escuelas de salud pública dicen que los lazos de la industria son demasiado cercanos y que la fundación no está siendo transparente respecto del impulso de relaciones públicas que le dará a Philip Morris.

La multinacional tabacalera “aumenta su comercialización de productos que previsiblemente seguirán matando a millones de personas en todo el mundo”, señalaron los decanos.

 

Mientras tanto, un panel asesor de la FDA recomendó que la agencia rechace la oferta de la compañía tabacalera de comercializar su dispositivo de tabaco sin humo presentada como una opción más segura que los cigarrillos.