FORTUNATO BENAIM: EL FALLECIMIENTO DE UN REFERENTE EN EL TRATAMIENTO DE PACIENTES QUEMADOS

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Fortunato Benaim fue un importante referente, sin duda un precursor, en el tratamiento de pacientes quemados en Argentina.

Nacido el 18 de octubre de 1919 en Mercedes, Pcia. de Buenos Aires, se traslada junto a su hermano a la Ciudad de Buenos Aires para realizar sus estudios de medicina, donde se gradúa en 1946.

Finalizados sus estudios ingresa junto con su hermano José al plantel del Hospital Cosme Argerich como médico en el servicio de cirugía.

Un día crucial y que marcó su destino en la carrera médica fue el 28 de diciembre de 1948, ese día el jefe de servicio le ordena " Dr. Benaim ocúpese de los quemados", refiriéndose a todos los ocupantes de la casa en la que se había producido un incendio en la Boca, barrio aledaño al Hospital Argerich.

Ese fue el inicio de su carrera como médico dedicado al tratamiento de quemados y a la creación del primer centro especializado en la Argentina, en un área específica del H Argerich con recursos y profesionales.

En 1952 fue creado el Instituto de Quemados, Cirugía Plástica y Reparadora, a cuya dirección accedió por concurso y ejerció el cargo entre 1956 y 1984.

Al promediar su carrera hospitalaria, con el fin de aportar su experiencia, organizó la Fundación del Quemado que lleva su nombre, cuyos estatutos fueron aprobados por la Inspección General de Justicia, autorizando su funcionamiento, el 31 de mayo de 1982.

Desde la Fundación continuó con su tarea docente y asistencial, desarrollando programas preventivos  en las escuelas, mejorando con sus innovaciones en el equipamiento específico en colaboración con su hermano,  y comenzando  en  1983  la publicación de una revista especializada en español.

En 1995 firma un acuerdo con el Hospital Alemán, por el cuál le cede a la  Fundación el cuarto piso de  un nuevo edificio construido, para la instalación allí del Centro de Excelencia para Asistencia de Quemaduras con la sigla C.E.P.A.Q. Así sigue realizando su labor asistencial, formando nuevos profesionales y desarrollando una metodología específica para el trabajo del equipo tratante, así como poniendo en funcionamiento sus innovaciones en equipamiento.   

Será recordado como uno de los pioneros en el desarrollo en la medicina del quemado.

Consejo de Administración de la Fundación del Quemado